Este acto fue encabezado por el Decano, Ingeniero Alberto Toloza, junto a su equipo de gestión, docentes, trabajadores no docentes, estudiantes, autoridades municipales, familiares y allegados a los nuevos graduados que colmaron el salón “Santiago Pampiglione”.
La ceremonia comenzó con el ingreso de los flamantes profesionales, tras lo cual se recibió a la Bandera Nacional y se entonaron las estrofas del Himno Nacional, acompañados desde el escenario por alumnos del Taller de Canto de nuestra Facultad, a cargo de la Prof. María Elizabeth Montenegro Nieto.
A continuación, el Secretario Académico, ingeniero Juan Calloni, tomó juramente a los nuevos profesionales para dar paso a la entrega de los títulos. El acto prosiguió con las palabras a cargo del graduado Sebastián Salvetti.
Seguidamente, el Colegio de Ingenieros Especialistas de Córdoba Delegación San Francisco entregó reconocimientos a los mejores promedios de cada una de las especialidades de Ingeniería. De esta forma, los ingenieros José Luis Daga, Oscar Zanardo y Esteban Testaferri, en representación de la citada entidad, distinguieron al Ingeniero Químico Maximiliano Senno (promedio 8,76); al Ingeniero Electrónico Andrés Ponzio (promedio 9,12); al Ingeniero Electromecánico Guillermo Bonino (promedio 8,50); y al Ingeniero en Sistemas de Información Sebastián Berberich (promedio 8).
La Asociación de Industriales Metalúrgicos hizo lo propio con el mejor promedio de Ingeniería Electromecánica, ingeniero Guillermo Bonino, y en representación de la Sociedad Rural, Néstor Saglione entregó una distinción al mejor promedio de la Licenciatura en Administración Rural, Licenciada Nadia Destéfani (promedio 8,09). Esta joven graduada también recibió un reconocimiento de parte del Consejo Profesional de Ciencias Económicas de nuestra ciudad.
Luego el Consejo Profesional de Ciencias Informáticas distinguió al Ingeniero en Sistemas de Información Sebastián Berberich, y finalmente dos integrantes de la Asociación de Estudiantes Tecnológicos de Ingeniería Química (AETIQ) entregaron un reconocimiento al Ingeniero Químico Maximiliano Senno. Para concluir con las distinciones, el Decano Toloza y el Secretario Académico, ingeniero Juan Calloni, entregaron un reconocimiento al mejor promedio de la XXX Colación de Grado, que recayó en manos del ingeniero Andrés Ponzio.
A continuación, se dirigió a los presentes el Decano de UTN San Francisco, Ingeniero Alberto Toloza, quien destacó en primer lugar destacó el rol de la docencia universitaria: “Ellos dedican tiempo a transferir conocimiento, a generar inquietudes, a despertar la vocación por el desarrollo profesional, eso hace que la Universidad distinga a la comunidad, porque una ciudad sin Universidad tiene características distintas. Esta Universidad, que está en el camino a cumplir medio siglo, ha marcado una impronta en la ciudad y la dejará también en cada uno de sus graduados, quienes también tienen aquí la posibilidad de seguir especializándose, porque la educación nunca se acaba”.
Toloza también destacó el rol de las familias y allegados de cada uno de los flamantes graduados que apoyaron y acompañaron la etapa de estudiantes y de formación profesional. “Tenemos un predio de ocho hectáreas, más de diez mil metros cuadrados cubiertos, 260 empleados directos, cinco carreras de grado, tres de posgrado, una de pregrado, y por el pórtico de ingreso, entre las 6 de la mañana y la medianoche, entran entre mil y dos mil personas por día”, destacó, y añadió: “Estamos resumiendo una etapa de cuatro años de gestión, que comenzamos en 2014 pero que aceptamos en diciembre de 2013. Y como dato, entregamos en ese período más de 1.500 títulos, alrededor de mil de la Licenciatura en Enseñanza de Ciencias del Ambiente, que finalizamos justamente este año, unos 270 títulos de grado, 170 de pregrado, y entre 60 y 70 de posgrado. Estamos haciendo un aporte a la comunidad y la institución en su conjunto merece el reconocimiento”.
Tras el retiro de la Bandera, las alumnas del Taller de Canto Silvina Monesterolo y Stella Olocco deleitaron a los presentes con la interpretación de dos canciones, dando así por cerrado el acto.