Esta propuesta se realizó en la ciudad de Córdoba, el marco del Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, y contó con la presencia del ministro de Ciencia y Tecnología, Pablo De Chiara; la ministra de la Mujer, Claudia Martínez; y demás autoridades provinciales y nacionales, así como rectores y decanos de universidades públicas y privadas; y representantes y autoridades de instituciones académicas, científicas, tecnológicas y empresarias de toda la provincia.
Para esta edición, se realizó una convocatoria abierta a todo el sistema científico y tecnológico, que recibió más de 50 postulaciones.
Tras la tarea de jurados y consejo evaluador se determinó entregar Menciones Especiales al Mérito Científico. En tanto que el Reconocimiento a la Joven Promesa fue para Natalia Tumas, el Reconocimiento como Mujer Científica del Año fue para Carla Giacomelli y el Reconocimiento a la Trayectoria para Beatriz Caputto.
De ese jurado formó parte la Vicedecana de UTN San Francisco, Ing. Claudia Verino, que además participó del Desayuno Global, un espacio de encuentro donde se compartió una charla con tres disertantes que tienen acciones de relevancia como mujeres vinculadas a las ciencias, a nivel nacional e internacional.
“Causa admiración lo que han logrado estas mujeres"
La Ing. Verino contó en qué consistió su actividad como parte del jurado: “Primero se arma una Comisión Asesora, que es la que recibe todas las postulaciones, y luego elige a cinco mujeres en cada categoría, que son tres. Una es a la Trayectoria, otra es a Mujer Científica del Año y la otra, a Joven Promesa”.
“En mi caso, participé como jurado y tuve que seleccionar entre cinco mujeres de cada categoría que fueron propuestas por la comisión, la elección se realiza de acuerdo a ciertos criterios que tenían que ver con su participación, su trabajo en gestión, sus años dedicados a la docencia y a la investigación. Y por otra parte, su historia de vida. También, si participaron en alguna cuestión de género”, agregó.
Verino se mostró complacida con el trabajo que las mujeres de la provincia vienen haciendo en ciencia: “Para mí haber participado como jurado es sumamente importante, emocionante, causa admiración conocer la estupenda labor en ciencia que han logrado estas ver lo que tantas mujeres. pueden llegar a lograr. Para mí el reconocimiento es una forma de visibilizar todo su trabajo”.
La Vicedecana también se refirió a su participación en el Desayuno Global y a las disertaciones de Brenda Bianquet, responsable de la estrategia de Asuntos Públicos, comunicación y relacionamiento con medios en L’Oréal Argentina; Vera Álvarez, profesora en la Universidad Nacional de Mar del Plata, investigadora de CONICET y presidenta de la Fundación Argentina de Nanotecnología; y de Lorena Saletti Cuesta, investigadora del Centro de Investigación y Estudios sobre Cultura y Sociedad.
“Bianquet habló sobre lo que hacen allí y sobre los incentivos que proponen desde la empresa para que mujeres se sumen a hacer investigación. Vera Álvarez, una mujer humilde, con un currículum enorme y mucha experiencia, muy sencilla. Había distintas miradas, una más comercial, la otra más de investigación y otra que apuntaba más, tal vez, a lo social. Me encantó participar del desayuno y escuchar opiniones. Fueron dos experiencias muy enriquecedoras”, cerró.
Por una participación equitativa de géneros en actividades científicas
También la Dra. Vanina Guntero fue parte de las actividades. En su caso, fue convocada por el Ministerio de Ciencia y Tecnología de la Provincia de Córdoba a participar de las Comisiones Ad-Hoc, lo que implicó, en una primera instancia, analizar los curriculums de las candidatas, y luego asistir a la reunión presencial para evaluarlos con sus pares.
Sobre los eventos, Guntero manifestó: “Considero que son una muy buena propuesta para llamar la atención de niñas, jóvenes y mujeres a que se animen a participar en actividades de investigación. En los eventos también participaron hombres, lo cual creo que es valorable para que los cambios que se buscan relacionados a la participación equitativa y demás sean verdaderos”.
La doctora también hizo mención al reconocimiento a las mujeres de la ciencia y sostuvo que “es una forma de poner foco en el papel que desarrollan las mujeres en el ámbito científico y de visibilizar la tarea diaria”.
“Para algunas es un aliciente para comenzar mientras que para otras lo será para continuar. Este es un primer paso, sin embargo, hay que ir más allá, es necesario que estén en agenda las condiciones laborales para alcanzar la equidad con el resto de nuestros pares”, agregó.
A su vez, destacó la calidad del trabajo que vienen haciendo las mujeres en el campo científico. “Diariamente observo a mis colegas su dedicación, empuje, plantear nuevas propuestas, buscar recursos, dar clases, formar estudiantes en investigación, escribir papers, participar de diferentes actividades de la Facultad. Y las observo tratando de coordinar todo esto con la vida familiar que no es poco. De manera que al leer los curriculums de las candidatas, escuchar a las galardonadas y a mujeres de mayor trayectoria me he dado cuenta que en algún punto luchamos las mismas batallas, por eso han captado mi más profunda admiración”.
“El trabajo que están haciendo es altamente calificado y merece ser conocido por el resto de la sociedad”, concluyó.
Atravesar desafíos para destacarse
De los eventos también participó la Dra. Mariana Bernard. Tras ello, comentó: "Es interesante conocer la trayectoria de las investigadoras premiadas. La sensación que me llevo es que todas en mayor o menor medida han atravesado desafíos para destacarse en la ciencia. El sistema científico actual no está pensado para compatibilizar la carrera y una familia, y esos sacrificios de quitar tiempo con los hijos es un pesar que muchas investigadoras manifiestan".
"Este reconocimiento que lograron estas investigadoras representa no solo sus exitosos logros, sino los de todas aquellas que en el camino de la ciencia van a sus propios tiempos, con sus propias historias y sus realidades particulares. Estar hoy por hoy en el sistema científico, por su exigencia, ya es un reconocimiento", agregó.
Para Bernard, la ciencia es para todos, y cada vez es más inclusiva, pero es un camino que se debe continuar allanando para que todos los que se aboquen a ella, independientemente del género, puedan trabajar libremente, con recursos, con vocación y compromiso.
"Es muy gratificante poder reconocer que localmente, en UTN San Francisco, los investigadores trabajamos par a par, respetuosamente, interdisciplinariamente, sin que se perciban distinciones de género. Y rescato algo de las expresiones de las mujeres premiadas, el verdadero reconocimiento es en realidad la gratitud del trabajo diario, en el equipo de trabajo, en los colegas, en la institución, es un premio sostenido por un equipo de gente, no un premio individual. Todos los que hacemos ciencia dependemos de un equipo de docentes, colegas y alumnos con quiénes compartimos y proyectamos las ideas", manifestó.
A la vez finalizó: "La riqueza que se alcanza cuando esos equipos son diversos en personalidades, en disciplinas y en género es irremplazable".