Se trata de Santiago Catalán, técnico universitario en Química; Emanuel Possetto; estudiante de la Tecnicatura en Programación; y Yamil Colombo y Matías Costamagna; estudiantes de Ingeniería Electrónica, quienes junto a Mariano Vatri, programador autodidacta, elaboraron una propuesta que resultó seleccionada como la mejor de la instancia local, con su proyecto denominado “Apple from Mars”.
En el marco de esta propuesta, los asistentes trabajaron en un plazo de 48 horas para desarrollar y proponer soluciones a problemas de la Tierra y el Espacio, utilizando los datos proporcionados por NASA, CONAE y otras agencias espaciales.
En el caso de los jóvenes, el reto que debieron enfrentar los hacía imaginar que eran astronautas que habían llegado a Marte a partir de un aterrizaje forzoso. El hábitat les daba comida, agua, aire y energía para mantenerse con vida, pero les faltaba la mayoría de las cosas necesarias para vivir y trabajar. Además, habían perdido sus herramientas y una rueda del rover, el vehículo de exploración espacial, se había dañado. Su desafío fue, con solo tres impresoras 3D, diseñar herramientas, muebles y otros elementos que los ayudaran en su misión de un año.
Para este desafío, los jóvenes trabajaron más de 30 horas divididas en tres días.
El proyecto
El grupo creó “Applee from Mars”, una misión cuyo trabajo implicó, entre otras tareas, el diseño de herramientas y sus planos, y la impresión en 3D de una de ellas a modo de muestra. También diseñaron juegos para responder a la necesidad de recreación.
Uno de los obstáculos que debieron sortear era que las impresoras imprimían en determinado tamaño por lo que debieron generar piezas más pequeñas y ensamblarlas.
Para poder hacerlo, debieron trabajar en la producción de materiales. Si bien en un primer momento pensaron en crear PVC, finalmente se decidieron a
producir kevlar, un material similar al nylon.
Uno de los puntos interesantes fue que las herramientas que diseñaron los jóvenes eran multifunción, es decir, podían utilizarse como herramientas o como utensilios, dependiendo la necesidad.
Entre otros temas, también pensaron en cómo reciclar los desechos. A la par, debieron hacer un informe detallado que debió ser presentado en inglés, y elaboraron una página web y un video que sirvió para la presentación.
La experiencia
Los jóvenes se mostraron por demás satisfechos con lo vivido. “La experiencia fue muy buena porque trabajamos muy bien en conjunto, esto te ayuda a trabajar en equipo porque te da un montón de habilidades. En un solo fin de semana, uno tiene que resolver un problema de la Nasa. Y además hubo una muy buena sinergia con otros grupos y me di cuenta que nos podíamos ayudar entre todos”, valoró Catalán.
Costamagna coincidó: “Me pareció una experiencia muy enriquecedora aporque pude aplicar los conocimientos que fui aprendiendo en el secundario y el primer año de Facultad y además pude compartir la experiencia con otros equipos”.
A su turno, Possetto mencionó que si bien dudó en ir en un primer momento por no sentirse preparado, fue una “muy buena experiencia”. “La experiencia es muy buena, ya de por sí tengo esa curiosidad e intento tratar de aprender cosas nuevas, estoy constantemente. Además quedé fascinado con las instalaciones de la Tecnoteca. Cuentan con computadoras con muy buenos requisitos. Además hice amigos y no nos faltó nada en ningún momento”.
“Estaría bueno que se siga repitiendo eventos como este tanto a nivel internacional como local, creo que San Francisco tiene mucho potencial para hacer algo similar pero a nivel local, seguramente las empresas del Parque Industrial tienen muchas problemáticas por resolver y los estudiantes de la ciudad y localidad vecinas tienen muchísimo potencial, lo demostraron ellos que están en primer y segundo año de la ingeniería y son muy jóvenes y sin embargo hicimos cosas con las que quedé fascinado y muy agradecido por la experiencia”, sumó.
Por último, Vatri reflejó: “Me imaginé que iba a ser algo de programación y si bien casi tengo un año programando, no sé si soy tan bueno, pero me animé. Fue una oportunidad única”.
Sobre el evento
La propuesta internacional Nasa International Space Apps contó con la participación de más de 45 personas. La actividad tuvo lugar en la Tecnoteca, bajo la coordinación del Área de Juventud de la Municipalidad de San Francisco y consistió en un hackathon, es decir, un encuentro de personas de distintas disciplinas y niveles educativos, desde los 15 años, quienes buscaron a través de su trabajo colaborativo, dar una respuesta a un reto o problema técnico de una organización en tiempo récord.
Las diferentes propuestas presentadas por los equipos participantes locales fueron evaluadas por un jurado conformado por integrantes de la empresa Investigación Aplicada (INVAP) y de Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE).
El equipo de los jóvenes resultó seleccionado como ganador de la instancia local y recibieron como premio un proyector, que donaron al IPEM Nº 96 “Prof. Pascual Bailón Sosa”, y un reloj inteligente para cada integrante del equipo.
Asimismo, el trabajo más votado por sus pares fue “GOAs”, del Grupo de Investigación Observatorio Astronómico San Francisco de la UTN San Francisco, que desarrolló un juego con un telescopio. Y hubo menciones especiales para los estudiantes secundarios que participaron. Vale destacar que varios de los grupos estuvieron integrados por estudiantes y docentes de nuestra Facultad Regional.