Sánchez, de 33 años, agregó que “hace poco tuve la suerte de estar en Rosario en un encuentro del que participaron las mayores empresas del sector agropecuario con sus áreas de Sistemas, y allí pudimos ver que las personas que trabajan en esas áreas desarrollan una de las actividades más importantes dentro de cada empresa, porque tenemos la formación en gestión y en el manejo de la información, la UTN nos prepara para la parte técnica como para la parte de gestión y administración”.
El joven ingeniero también indicó que “la formación de la Facultad San Francisco se basa en trabajar en equipo, colaborar, desde primer año, y eso después uno lo traslada al ámbito laboral. Creo que el campo de acción que tenemos en la ciudad y en la zona es muy grande, los graduados que conozco y los que aún les quedan algunas materias para graduarse en Sistemas, todos tienen trabajo, hay muchas empresas que los requieren”.
“Por otra parte en los últimos años se comenzó a valorar más las carreras técnicas de nuestro país. Es muy importante lo que podemos aportar. La formación que brindan las ingenierías, por ejemplo, hace ver las cosas de manera diferente, con otro nivel de análisis y abstracción que es difícil encontrar en otras carreras, las ingenierías preparan para desafíos que incluso uno no tenía pensado y creía que quizás no podía resolver, pero la preparación que uno recibe brinda herramientas para enfrentar esas situaciones”, añadió.
Sánchez hizo su formación primaria y secundaria prácticamente en su totalidad en la Escuela Normal “Dr. Nicolás Avellaneda”, para luego ingresar a la UTN. “Salvo los dos primeros años del nivel medio, el resto de mi educación primaria y secundaria la hice en la Escuela Normal, no vengo de una escuela técnica. La formación fue buena en el nivel medio, en algunas áreas más que en otras, pero por ejemplo en química teníamos una buena formación”.
“Desde chico, desde los 10 u 11 años tuve computadora, en un momento en el que no había casi negocios de computación en la ciudad. Compraron una computadora en mi casa, me empezó a gustar, empecé a hacer unos cursos de computación, y cuando fui avanzando en el tiempo, ya en el nivel medio, y llegó el momento de decidir dónde estudiar, mi hermana había estudiado Ingeniería Química en la UTN San Francisco, así que decidí quedarme acá a estudiar Ingeniería en Sistemas. Si me hubiera ido a Córdoba, por ejemplo, iba a estudiar lo mismo, así que decidí quedarme en San Francisco, y no me arrepiento para nada, conocí muchísima gente, mucha gente buena, fue un paso importante que me marcó, hice muchísimas cosas, estuve en el Centro de Estudiantes, es equipos de investigación, participé de encuentros deportivos con el equipo de vóley, porque era un deporte que venía practicando en la secundaria, y se había armado un grupo muy lindo, con el mismo entrenador que tuve en la secundaria, así que fue algo muy lindo, una muy buena época. También lo fue participar de grupos de investigación, en los que estuve prácticamente todos los años”, comentó.
Al referirse a su desempeño profesional, Sánchez explicó: “En los últimos años de la Facultad empecé a trabajar en una empresa de la ciudad, de una persona que se graduó en esta Facultad, y después de terminar de cursar me fui a Buenos Aires a trabajar en el área de Sistemas de un banco, todavía no había terminado mi carrera. Pasé por un proceso de entrevistas bastante extenso, inclusive entrevistas grupales, y allí me sorprendió la consideración que tienen de la UTN, está considerada a la altura de la UBA, y si uno tiene un título en Sistemas de UTN es muy probable que consiga trabajo”.
“Volví de Buenos Aires porque me costaba poder rendir las materias que me quedaban, el ritmo de Buenos Aires no es fácil, no es tan sencillo, y tomé la decisión de volver para poder terminarla, rendir las materias que me quedaban y la tesis. Cuando regresé, volví a trabajar en la misma empresa en la que trabajaba antes de irme, el Grupo Creartel, y después tomé la decisión de irme a una empresa agropecuaria, Gaviglio Comercial, al área de Sistemas. Es una empresa grande, con más de 200 empleados, cerca de 140 puestos de trabajo, muchos servidores, catorce sucursales que se tienen que conectar a través de internet, hacemos desarrollos internos para la empresa, mantenemos los sistemas bases que se utilizan, realmente estamos a cargo de todo lo referido a informática y tecnología de la empresa, somos cuatro personas en el área y los desafíos son muchos y grandes”.
Finalmente, el joven ingeniero destacó que “si bien hoy hay muchas carreras para elegir, también había mucho años atrás, la base de las carreras sigue siendo la misma, yo no dudaría en volver a elegir la UTN San Francisco. Cuando me tocó irme a otra ciudad la UTN está altamente valorada y el respeto que se tiene por esta institución es muy grande, está al alcance de la mano, es una Universidad pública y gratuita, a mí me permitió poder estudiar, hay que aprovecharlo porque hay mucho por hacer”.